Calientan como una estufa, pero ocupan menos espacio y decoran.
Las chimeneas eléctricas han mejorado mucho y, si puedes instalar una, quedan muy bien en ciertos salones para darles un toque clásico o uno lujoso a los que tengan un estilo más vanguardista o minimalista. Una chimenea queda bien en cualquier salón siempre que éste esté decorado con ciertos gusto.
Características y funcionamiento
Las chimeneas eléctricas utilizan tecnología eléctrica para, además de calentar la estancia, emular el aspecto de una chimenea de leña o gas. Para ello usa un calefactor, que suele ser una serie de resistencias que disipan calor, y un conjunto de luces LED y rodillos giratorios con imágenes de llamas sobre una pantalla reflectante para simular el movimiento de las llamas al quemarse la leña.
Algunos modelos permiten ajustar la temperatura y la altura o forma de las llamas a través de mando. Los mejores, incluyen hasta efectos de sonido para imitar la quema de la madera y ofrecer una experiencia lo más cercana posible a la de una chimenea convencional sin el humo ni los peligros que conlleva para la seguridad de tu hogar, el edificio y el medioambiente.
Qué tener en cuenta a la hora de comprar una
Lo más importante a la hora de instalar una es, aunque parezca obvio, que encaje en tu salón. Lo ideal sería instalarla en la pared o apañarla dentro de un marco de chimenea tradicional, que los hay muy bonitos, aunque suelen ser caros si éstos son de calidad y antiguos, pues se han revalorizado gracias a que después de años se puede volver a tener una chimenea en el salón. Mide bien, y elige correctamente.
Luego has de elegir la potencia que deseas, pero te recomendamos busca modelos con termostatos y ajustes de potencia con varias regulaciones para que funcionen como tú quieres. Casi todas pueden encender la llama para mantener la estancia a 20 grados, por ejemplo.
Para la potencia, se suele recomendar unos 100 vatios por metro cuadrado. Es decir, para un salón de 30 metros cuadrados, lo óptimo sería una chimenea eléctrica de 3.000 vatios. Ésta es una regla genérica, pero has de considerar el aislamiento de la habitación, la ubicación geográfica etc. o si va a ser simplemente un complemento a tu calefacción de gas natural, en cuyo caso te bastará cualquiera.
Ten en consideración las características adicionales como la calidad y funciones de su mando a distancia, capacidad de programar con temporizador, ajuste y estética de las llamas o sonidos.